Proteger el producto de nuestros clientes

Proteger el producto de nuestros clientes

Una vez sabemos cual es el tipo de material que vamos a emplear para embalar el producto de nuestro cliente, el siguiente paso es ver si es necesario, que el producto en el interior de la caja, necesite alguna fijación o sujeción adicional, para evitar manchas de roces, ralladuras, etc.

En todos los embalajes,  es tan importante la protección externa, como la protección interna, para preservar el material a transportar o estocar en perfectas condiciones, sin que pierda sus propiedades. En la protección externa podemos emplear cajas de polipropileno celular, cajas de cartón, cajas de madera, etc.

Como comentamos al principio, elegido el material que vamos a emplear para embalar nuestro producto,vemos de que manera podemos proteger el producto en el interior de la caja, para cubrir esta necesidad y preservar con el embalaje de nuestros clientes, disponemos de gran cantidad de materiales de relleno y protección, que nuestros comerciales les asesoraran en función de las necesidades de sus productos a embalar. En este articulo hablaremos hoy de la protección mediante film de burbujas, en lo que podemos destacar principalmente:

La protección de burbuja en rollos, lo que se conoce en el mercado como film de burbujas, formado por un film de polietileno de burbujas de aire transparente, normalmente de 4 mm. de espesor. Al ser ligero y flexible, constituye un colchón para golpes y vibraciones en la expedición de materiales a transportar y manipular. Así mismo protege su contenido del polvo y la humedad, y disponemos de varios anchos y longitudes en función de sus necesidades.

También «iPackaging», dispone la protección de burbujas antiestático, con las características  del anterior producto, pero especialmente diseñado para proteger sus embalajes los productos sensibles a la electricidad, dentro de este género utilizamos mucho la bolsa de burbujas  antiestática con cierre adhesivo y banda protectota.

En todos los  ejemplos comentados, con un «simple cúter», vamos cortando el film a medida del producto a envolver y embalar en la caja.